

Referencia: 2009202012
La magnitud temporal, material y sobre todo humana de la batalla de Verdún justifica sobradamente que a cien años de su inicio siga siendo un objeto de estudio que no se puede dar por cerrado y que mantiene un importante grado de debate historiográfico. La lógica del “desgaste” de Erich von Falkenhayn se saldó con un duelo aparentemente inconcluso en el que ambos bandos sufrieron un número equiparable de bajas y donde, desde una perspectiva operacional, no se produjo la más mínima alteración del frente que resultara significativa… y sin embargo resultó ser una batalla decisiva. Aunque a simple vista careció de objeto, en esta batalla ambos bandos dieron relevo a sus cúpulas militares y viraron su estrategia. Las ideas maduradas al finalizar la batalla de Verdún hicieron creer que las batallas venideras podrían poner fin a la guerra. Sin embargo, eso no sucedió. Ils ne passeront pas!
Boudica. Solo su mención trasciende la Historia. Menos Conocida que otros importantes personajes femeninos de la Antigüedad, como Cleopatra o Zenobia, no ha sido obstáculo para que sus hazañas pervivieran durante milenios hasta convertirse en leyenda. El símbolo femenino del valor y la lucha por la libertad en Britania. Boudica, soberana por derecho de los icenos, uno de los más importantes pueblos que habitaban la lejana Albión (la “isla blanca”, como era conocida hasta ese momento), lideró también a otros muchos frente a la ocupación romana. La lejana Britania había conseguido mantenerse ajena a la ambición romana hasta mediados del s. I aC, pero en el 61 dC, los pueblos que aún se resistían a la ocupación acumulaban ya cerca de dos décadas de enfrentamientos continuos con las legiones de Roma. Boudica se convirtió en una figura de renombre por méritos propios. Una reina cuyo coraje y valentía hicieron temblar al todopoderoso Imperio romano. Nunca antes sus legiones tuvieron que enfrentarse a un ejército dirigido por una mujer, y no hay duda de que jamás lo olvidaron.